Los primeros seres humanos modernos, surgieron en Africa hará entre 120.000 y 100.000 años y poco a poco fueron perdiendo la capa más externa de la piel para poder refigerarse a través del sudor. Debido a esto la piel estaba expuesta directamente al sol, por lo que generaron una pigmentación oscura para protegerse del sol.
La radiación del sol (ultravioleta B) produce vitamina D en nuestra piel pero puede destrozar el ácido fólico (que contribuye en el rápido crecimiento de las células). Las madres con deficiencia de este ácido tienen menos hijos que sobreviven y las que tienen deficiencia de vitamina D son menos sanas. La función de la pigmentación consiste en frenar los efectos negativos sobre la destrucción del ácido fólico permitiendo la creación de vitamina D.
Esta pigmentación es mucho más fuerte en zonas cerca del ecuador. Y a medida que el humano fue emigrando a otras zonas del planeta más al norte, dejaron de producir suficiente vitamina D y su piel se fue aclarando. Los humanos con la piel más clara se localizan en los polos. Y la gente con pigmentación fuerte que viva cerca de allí tienen deficiencia de vitamina D.
En definitiva, que tantas guerras y rechazo solo son por nuestra adaptación al sol.
Fuentes: